Hace un tiempo, no recuerdo muy bien donde, leí que la vida no se cuenta por las respiraciones, sino por los momentos que se ha cortado la respiración, bueno no sé muy bien si la frase es así, pero aunque no lo haya expresado con exactitud, creo que se entiende perfectamente, habla sobre esos momentos que hacen que tiembles, que se te pare el pulso y sientas el corazón en la garganta, esos instantes que lo son todo, por eso he decidido recordarlos en esta entrada, porque a lo largo de mi vida hubo muchos de esos pequeños grandes momentos.
Así que doy gracias por las sonrisas que iluminan mi vida, por mis amigas, por la paciencia, doy gracias por mi familia. Estoy agradecida por la lluvia, por mi sonrisa, por mi fe , por el apoyo que me han transmitido en los momentos duros, lo momentos de paz, por cada palabra de ánimo, por las caricias llenas de pasión, por cada error que me ha ayudado a mejorar. Doy gracias por cada latido y por cada suspiro, por las risas descontroladas y por cada besos, por el poder aprender cada día algo nuevo, por poder pedir perdón y rectificar, por no ser perfecta también doy gracias,. Doy gracias por poder expresar mis pensamientos y por no ponerle limites a mis sueños, por los libros que he leído y por la música que ha llenado mi vida, doy gracias por cada día, cada noche, cada hora, cada minuto, cada segundo de mis 16 años…¿y tú por que das gracias?
