Nuestra amistad me ha enseñado más que cualquier otra relación que haya tenido. Me habéis enseñado a respirar de una manera diferente, de una manera mejor. Me habéis enseñado a saborear sin prisa el aire. Me habéis enseñado a querer más a mis emociones, a volver siempre a la carga. A querer más, a volar más alto.
Gracias a nuestra amistad soy más fuerte ahora. Sin pretenderlo habéis influido más en mi vida que muchas otras personas que se llevaron gran parte de lo que fui.
Con vosotras he reído y he llorado. Hemos estado en una montaña rusa de emociones, en la que siempre hemos tenido viajes gratis. La nuestra, es una amistad de sentimientos y palabras por escrito. Corazones rotos sin piezas de recambio, pero...siempre habrá corazones de recambio.
Gracias a vosotras lo sé. Una vez me impulsasteis y ahora ya salto de los trampolines yo sola.Sois la persona de la que más he aprendido, indudablemente.
Sois de lo más importante en esta vida.